La falta de una siesta, hizo dificil la adaptación al nuevo colegio |
Hasta el día antes de comenzar el cole, #superu estuvo yendo a su antigua escuela infantil (guarde) en los "días sin cole", manteniendo sus horarios de comida y siesta.
Sin embargo, al llegar al colegio y al no tener clases por las tardes, el horario para él fue bastante diferente.
Seguía entrando a la misma hora, sin embargo, si no se quedaban al comedor, salían a las 13.30, y si por el contrario sí se quedaban, como en el caso de #superu, se les podía recoger de 14 a 15 horas.
Durante el mes de Septiembre y gracias a la conciliación que pude realizar en mi trabajo, yo salía antes de trabajar a cuenta de sumar todas esas horas como días de vacaciones.
Lo recogía a las 15 horas, pero a mí no me había dado tiempo a comer, así que tenía 2 opciones cuando llegábamos a casa:
- Si comía y luego intentaba que nos echáramos la siesta, en ese tiempo, se había despejado y me decía que la siesta para mí
- Si intentaba que se echara la siesta, podía comer a las 4 de la tarde, porque ya no era su horario de dormir, y le costaba bastante, y en más de una ocasión después de intentarlo optamos por dejarlo.
Así que durante todo el mes de Septiembre, #superu se encontraba cansado, porque es un peque que necesita recuperar energía con la siesta, lo que hacía que estuviera irritable, irascible y sin ganas de nada.
Y cuando llegó Octubre, y todo volvió a su horario, ya que durante el primer año de Infantil en nuestro cole se echan la siesta, volvió a ser un niño más relajado (dentro de lo que es).
Por ello, vamos a ir viendo cómo se plantea este curso, en el que les quitan la siesta.
Y vosotros, ¿cómo lo habéis vivido: adaptación o desadaptación al colegio?
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